Se dice que el tercer lunes de Enero es el día más triste del año, y es que para muchos, este mes es uno con los que energéticamente más cuesta lidiar porque pasas drásticamente de la alegría, amor, entusiasmo y esperanza de diciembre a la incertidumbre, miedo,  angustia o pesar sobre el futuro, sobretodo cuando todavía estamos lidiando con los efectos colaterales del Covid. 

Así que antes que nada,  es importante que honres tus lágrimas porque son una expresión de tus sentimientos. Es uno de los lenguajes de tu alma.  Cada lágrima tiene una misión especial en tu vida; algunas están destinadas a sanar tu ser gota a gota, otras se presentan para avisarnos que algo  o mucho está fuera de balance y  que es tiempo de llevar amor a esa parte de ti que lo necesita a raudales. Las de Enero por ejemplo, las he llamado la de los recuentos, porque generalmente en este mes o cuando es tu cumpleaños por naturaleza entras en una profunda introspección sobre tu vida;  y es ahí cuando se desbordan los sentimientos porque haces un balance de lo que consideras bueno, malo, o aún en pendiente; pero sea cual sea la misión de tus lágrimas, todas traen consigo una revelación, y la mayoría caen por tus mejillas con el único propósito de crear nuevos caminos, nuevos comienzos para ayudarnos a volver empezar de cero, y es aquí donde quiero compartirte una gran revelación a través de un ejemplo:  

Si piensas en un río, sabrás que la mayoría de ellos se forman en la parte alta de las montañas debido al agua acumulada de la lluvia, manantiales, hielo y nieve.  Llamemos a este río: “Corazón Valiente”.

La enorme montaña era realmente fría y la promesa era que Corazón Valiente llegaría a un lugar cálido, a un santuario conocido como “Las posibilidades infinitas del amor.” 

En un principio, Corazón Valiente fue formando su propio cause o camino con una fuerza avasalladora mientras bajaba las pendientes de aquella montaña.  La fuerza necesaria para poder llegar algún día a ese santuario. Después, su intensidad fue disminuyendo pero aún así corría su bendita agua con fuerza sin detenerse. De pronto una voz le dijo: “El propósito de tu vida sucede a cada instante, tu propia esencia ya lo sabe. Nunca es algo que se deba forzar o aprender, es algo que aceptas, honras y dejas que te expanda. Toda alma ha llegado ya con sus dones, sólo tiene que descubrirlos y expandirlos. Vive el aquí y ahora. No estás solo y nunca lo estarás.” 

A lo largo de su travesía descubrió el para qué de su vida honrando a todo lo que formó parte de su camino, pero hubo muchos momentos donde ese río se volvió muy estrecho, a veces tan estrecho que nadie pensaría que era un río y mucho menos que llegaría al mar,  pero  Corazón Valiente no dudó ni se llenó de miedo; dentro de él sabía que algo mucho más grande jamás conocido pero completamente majestuoso esperaba por él, así que sólo siguió y permitió que esa bella energía que lo contenía y guiaba en todo momento lo llevara al mar. Nuevamente esa dulce voz le dio un mensaje: “A veces todo tiene que estrecharse para que vuelvas a unir todas tus partes y te alinees a tu corazón, de esta manera, escucharás los mensajes de los latidos de tu corazón.  A veces todo tiene que estrecharse porque se precisa desaceleres tu ritmo para poder alinear la sincronía de lo que se está co-creando para ti. La paciencia siempre ha sido parte de la sabiduría. A veces todo tiene que estrecharse para que te permitas soltar lo que ya cumplió su ciclo.  A veces todo tiene que estrecharse para que te permitas ser arrullado por el amor y vivir la mayor transformación de tu vida conocida como la transformación del amor. 

Recuerda Corazón Valiente, cuando llegue el momento de tu mayor transformación, podrás sentir que mueres, pero  nada de ti morirá, todo lo contrario, sólo renacerás, y cada gota de tu ser se expandirá en el Mar de las Posibilidades infinitas del Amor.”

Pasó el tiempo y la sincronía hizo su obra, se cumplió la promesa y Corazón Valiente llegó finalmente al mar donde las posibilidades para cada gota de su ser de expandirse en y para el amor son infinitas.

Tus lágrimas tienen una misión sagrada, por eso el cielo las honra tanto, porque aunque visiblemente son agua salada, energéticamente tienen el poder cuántico de transmutar sí o sí tu energía. Esto es importantísimo lo comprendas porque muchas veces reprimes tus lágrimas cuando justamente tienen el poder de ayudarte a transformar la energía de dolor en sanación; la de impotencia en acción, la de confusión en claridad, la de desolación en esperanza, etc.  Así que suelta toda idea retrógrada o absurda de que llorar es un símbolo de debilidad. Suelta toda idea retrógrada o absurda de que los hombres no lloran. Suelta toda idea retrógrada o absurda de que si estás pasando por una situación que te rebasa sólo tienes derecho a llorar un día, o una semana.  Llorarás el tiempo que sea necesario hasta que culmine de transmutar esa energía.  Jamás permitas que nadie te diga ¡no llores más!. Al llorar haces uso de una herramienta divina y cuántica que te fue dada para ayudarte a recuperar tu poder, balance, paz interior,  amor propio, visión, fuerza, claridad, etc. Para que puedas expandirte nuevamente, justo como el río al llegar al mar.  A veces sentimos que la vida se vuelve muy estrecha, así que permítete llorar, para que esas lágrimas te regresen a ti y al mismo tiempo te lleven al mar de las “Posibilidades Infinitas del amor”. Tu presencia tiene un para qué único e intransferible. Tu presencia tiene un gran impacto en el planeta y en el universo. 

Cuando te sientas en el momento más estrecho o sombrío de tu vida, piensa en algo, sólo algo por lo que te sientas inconmensurablemente agradecido, ya sea una situación, algo que hiciste, el amor de una persona, etc. Honra ese momento o a esa presencia en tu vida. Siente esas llamas de agradecimiento dentro de ti. Después trae otro momento por el que te sientas completamente agradecido, te darás cuenta el poder avasallador que tiene el agradecimiento para cambiar tu energía de sombra en luz. Atravesarás ese cauce estrecho pero con otra vibración… la del amor. Todo tiene un para qué.

Y recuerda: “Nada ni nadie puede quebrar tu espíritu, ni si quiera tu mismo. A veces las lágrimas caen por las mejillas con el único objetivo de trazar nuevos caminos, nuevos comienzos.  Hoy, celebra cada nuevo camino, porque mañana, cuando abras nuevamente tus ojos, te darás cuenta que tienes la oportunidad de reinventar tu destino.”  

Gracias por existir.

Eres amor… y así es.
Eres por siempre amado… y así es.
Autor: Gabriela Zarzosa Quintero

© Derechos Reservados.

Queda prohibida su modificación parcial o total.

Benditos los vientos de cambio que tienen la misión de renovar completamente nuestro corazón, mente, vida y alma; así como la de refrescar, limpiar y sanar para poder vivificarnos.

La energía de un nuevo ciclo ha llegado 2+0+2+1=5. Numerológicamente el 5 representa los “cambios”, así que antes de sentirte incómodo con esta palabra tienes que saber que esta energía ha llegado como un gran “regalo”.

Nada en la luz es estático, nada en el cosmos es estático, entonces debes empezar a comprender que los cambios son simplemente “energía divina lista para la acción”; por lo que tienes que empezar a desmoronar la idea de que los cambios son generalmente malos, sólo porque algunas decisiones que tomaste no fueron las más sabias, o sí? porque no hay nada más valioso para tu espíritu que la experiencia misma de descubrir lo que eres, aunque en el camino experimentes también lo que no eres.

Estás tan obsesionado en medir todo como éxito o fracaso, que te olvidas que tu mayor sabiduría, expansión, fuerza interior, voluntad, sanación,  renacimiento y creatividad surgen a partir de lo que no resultó como esperabas.  Le das tan poca importancia a lo que hace poco te compartí sobre los saltos cuánticos de fe aunque yo prefiero llamarlos saltos cuánticos de certeza, donde te expliqué que es tiempo de aceptar que tal vez no te encuentres aún en el lugar donde quieres estar (felicidad/plenitud/bienestar,etc.), pero llegarás si así te lo permites porque es tu derecho divino.

Debes de dejar de subestimarte y de subestimar todo lo que crees comprender sobre el pasado y futuro porque tiendes tanto a racionalizarlo todo que dejas fuera a la energía más importante de tu vida y que lidera todo… el amor.

El amor es el vehículo por el que la luz se expande. Eres luz en expansión, por lo tanto el amor es tu motor y herramienta divina más poderosa y la has subestimado tanto que lo olvidaste. Cuántas veces has confundido el amor con desamor o peor, con apego. Cuántas veces has pensado que es lo que te debilita cuando justamente es el centro de todo tu poder eterno. Tienes que reconectarte con él, porque su energía es cuántica, es decir, no tiene límite de tiempo ni espacio.

El amor es una energía ilimitada y la has tenido en estado estático porque te da miedo aceptar que los cambios están destinados a que seas la mejor versión de ti mismo, aunque en el camino descubras justamente la peor versión de ti mismo.

El número 5 empujará continuamente los cambios de amor y hacia el amor. “Cambios puros, honestos, congruentes que busquen ayudarte a ser la mejor versión de ti mismo.” El 5 es el número que constantemente te dirá: No esperes que el mundo, las personas o las situaciones cambien para entonces hacer cambios. Haz las cosas diferente y todo por añadidura cambiará.  Y en todo este proceso romperás tus miedos y manejarás la frustración como un impulso y no como un pretexto.

De eso se trata el 5 en tu vida. De permitirte conocer y descubrir el sentido de tu vida, a través de la experiencia y autoconocimiento; así que lo que menos va a tener este año es energía estática.  Y es ahí donde surgirán los “regalos /bendiciones celestiales”, porque toda esta energía en movimiento te llevará al lugar físico de la tierra donde tengas que estar en este nuevo tiempo a causa de un cambio de país, casa, profesión, relación, todo lo anterior, etc.

El otro obsequio es que los vientos de cambio te ayudarán a limpiar toda la energía estática que has acumulado por tanto tiempo y que tiene relación con heridas, resentimientos, culpas, frustración, etc. Este proceso puede no ser cómodo, pero es necesario porque es un regalo, y el amor siempre te libera.

Así que te voy a dar dos recomendaciones:  Cada vez que te bañes, habla con la energía más sublime y amorosa con la que te relaciones: Dios/ Fuente Celestial; y dile que en el nombre del amor y la benevolencia limpie todo tu ser, dile que limpie y purifique todos tus cuerpos (mental, emocional, físico) y que se lleve de ti todo lo que te ha opacado, todo lo que ha limitado tu derecho a ser feliz, todo lo que ya cumplió su ciclo; pero también dile que  esas nuevas gotas de agua te llenen de amor y bendiciones.  Finalmente agradece. Es una plática muy íntima, amorosa y personal. Esto es un ejemplo, pero asegúrate de dialogar con el corazón completamente abierto.

La segunda recomendación depende del lugar físico donde te encuentres, pero debes de estar al aire libre y cuando el viento sople y entres en tu templo interior, dile a ese viento, que es un sagrado símbolo del Espíritu de Dios: Querido Espíritu Santo, llévate toda confusión, todo tormento, todo lo que me ha abrumado, toda tristeza, toda ira, todo lo que no me ha permitido ver con los ojos de amor para que pueda tener claridad y paz interior. Nuevamente agradece.

Te sorprenderá lo rápido que pasarán los momentos desafiantes que te tienen agotado, desesperado, amargado, a punto de tirar la toalla de la vida; para en su lugar descubrir un nuevo tipo de conexión jamás conocida. Un fuego interior que te renovará por completo, te reconectará con el sentido de tu vida, con la paz, certeza, esperanza. Un nuevo tipo de poder ilimitado dentro de ti conocido como “El poder del amor”. Estarás tan expandido y con una vibración tan alta que entonces las posibilidades infinitas y la sincronía estarán trabajando a tu favor para que elijas la que más llene tu corazón, vida y alma.

Será fundamental respetar el libre albedrío de los demás en este tiempo para que dejes de tejer nuevos resentimientos en tu corazón. Los apegos son sólo disfraces del ego envueltos en corazón. El amor no tiene apego. El amor nunca manipula, chantajea, dramatiza, se resiente, ni ata. El amor es libre. Escribe 100 planas en tu corazón sobre esto. Debes comprender que todo lo que existe es cíclico. Es la naturaleza de tu propia energía y la de todo el cosmos. Y en este nuevo ciclo, los vientos de cambio tienen toda la intención de tu alma de regresarte a la vida, de regresarte a ti, de regresarte al amor y a sus posibilidades infinitas.

Te propongo algo, esta vez date la oportunidad no de fijar propósitos, sino que sean 12 nuevas maneras de amarte. Elige una nueva manera de amarte cada mes. Enamórate de ti, porque sólo el que se ama incondicionalmente a sí mismo, es capaz de amar a la humanidad.

Estarás contigo hasta tu último aliento,
en los tiempos de paz, pero también en los de tempestad.
En cada muerte y renacimiento que experimentes. 
Mereces amarte inconmensurablemente,
Mereces tu perdón y compasión.
Mereces ser tu persona favorita.
porque en ese éxtasis de amor,
te darás cuenta que nunca has estado solo.
Autor: Gabriela Zarzosa Quintero

Lo que describo a continuación tiene como finalidad conocerte y comprenderte más para que puedas llevar amor a las partes de ti que más lo necesitan; si sientes que estás experimentando una versión poco amorosa o negativa de ti, busca hacer todo lo que se te recomendó con anterioridad para que vuelvas a tu centro y reino interior.

Si eres un signo de Tierra como: Tauro, Virgo y Capricornio, debes leer esto varias veces, porque  fácilmente podrás tornarte criticón, depresivo, racional, testarudo, berrinchudo, iracundo, cerrado o necio. Esto será más marcado si además de tener un signo de Tierra, naciste un día: 2,4,13,20,22,31, mes 4 o sabes que tu número de misión es 4. Si te sigues negando a los cambios, no sólo éste año, también el 2022 podrían ser de los años más incómodos de tu vida. Recuerda, los cambios son energía divina lista para la acción. Necesitarás qué digo doble, triple dosis de amor por ti mismo. Un tiempo para conectarte con tu espíritu y con la energía todopoderosa del amor. Medita y acepta todo lo que te conecte con lo positivo, con la sanación interior y lo que aumente tu vibración, por lo tanto, con todo lo que te haga honestamente feliz.

Si tu signo zodiacal es de Agua como: Cáncer, Escorpio y Piscis, estarás muy sensible con tanto cambio o con la profunda limpieza interior que ya inició.  Aumenta la dosis de amor por ti mismo, realiza continuas actividades que te alegren el alma y bendice cada una de tus lágrimas porque todo lo que te está ocurriendo está destinado para que seas feliz aunque por ahora te encuentres justamente en lo que mencioné como un “salto cuántico de fe/certeza” o que no te sientes ni de aquí ni de allá. También podrás tornarte más dramático o resentido respecto a lo que hacen o no hacen los demás. Céntrate en ti, enamórate de ti y sé tu persona favorita. Esto se intensificará más si además de tener un signo de Agua, naciste un día 3,12,21,30, mes 3 o 12 o sabes que tu número de misión es 3.

Si tu signo zodiacal es de aire como: Géminis, Libra y Acuario te sentirás cómodo con los cambios, sólo enfócate, repito, enfócate, porque cuando te dispersas mentalmente, igualmente dispersas tu energía y eso hace que no alcances tus sueños y anhelos más rápido. Enfócate y Decreta. Tu voz, es la voz del Espíritu. Aprovecha la gran conexión que tienes con la Fuente Celestial por derecho divino.  Si tu fecha de cumpleaños es en un día: 4,13,22,31 ya seas Géminis, Libra o Acuario, podrás tornarte un poco testarudo, berrinchudo, iracundo, cerrado o necio. Si naciste en un día 3,12,21,30  igualmente Géminis, Libra, Acuario podrás estar más sensible, dramático o resentido con lo que hacen o no hacen los demás aunque será temporal y eso solamente indicará que estarás buscando la felicidad fuera de ti y no dentro. Fluye y deja que la sabiduría de tu espíritu lidere.

Si tu signo zodiacal es de fuego como: Aries, Leo y Sagitario te sentirás motivado e impulsado por los cambios porque tienes la profunda certeza de que estarás en un lugar mejor, pero bájale dos rayitas a la intensidad de tu fuego que a veces lo confundes con el ego, porque podrás terminar perdiendo a alguien muy importante o volverte tan intransigente que tu mismo te hagas autoboicot respecto a  tus propios sueños y anhelos.  Si tu fecha de cumpleaños es en un día: 4,8,13,17,22,26,31 ya seas Aries, Leo y Sagitario, podrás tornarte un poco o muy insolente, intransigente, testarudo, berrinchudo, iracundo, cerrado o necio. Si naciste en un día 3,12,21,30  igualmente Aries, Leo y Sagitario podrás estar más sensible, dramático o resentido con lo que hacen o no hacen los demás. Repito, bájale dos rayitas a tu intensidad y practica la meditación o todo lo que te conecte nuevamente con tu templo interior.

Querido Ángel Humano, Querido Hijo de las Estrellas, no tengas miedo, recuerda, finalmente el amor está al mando, por eso tanta mierda energética está saliendo a la superficie, porque el amor no puede morar donde habita la incongruencia, maldad y falsedad. El mundo y la humanidad ha entrado a un tiempo de profunda purificación. Será un tiempo de revelaciones. Son los vientos de cambio, los vientos del amor. La era del amor, compasión y benevolencia. Y así es. 

Gracias por existir.

Eres amor… y así es.
Eres por siempre amado… y así es.
Autor: Gabriela Zarzosa Quintero

© Derechos Reservados.

Queda prohibida su modificación parcial o total.