Especiales
«Rendirse al amor»
Con la llegada del Solsticio, estamos casi por finalizar el sexto mes de un año 11, un tiempo que ha sido una verdadera sacudida sin precedentes, pues de eso se trata este año con vibración 11, de la iluminación; que muestra en su honestidad lo bueno y lo malo; lo que suma y lo que resta, el amor y el miedo disfrazado de odio; ya nadie, por más que lo intente, podrá seguir ocultando lo que es, quiere y representa.
Es y seguirá siendo tan evidente esta energía, que ya no podrás engañarte más, pero si lo permites, desde lo más profundo de tu ser puedes abrazar la energía de este nuevo ciclo que hoy toca a tu puerta para finalmente soltar el control y permitir que esa luz visible e invisible penetre en cada poro de tu piel, en cada pensamiento, sentimiento y acción; pues es un tiempo no para luchar más, sino para atrevernos a «Rendirnos al Amor».
Suena tan amoroso y tierno, pero tan difícil de comprender, porque la expresión del amor precisa soltar tu propio concepto de «amor».
Rendirse al amor, es descansar completamente en la sabiduría de que la energía de luz se filtrará y tomará la forma que precisa tu vida en este momento. Es atreverse a soltar completamente el control de tus propios conceptos de éxito, felicidad, pareja, familia, trabajo, salud, que te han hecho esclavo de tanta insatisfacción, incongruencia y frustración.
Esta energía resplandeciente de luz visible e invisible, en su pureza, está libre de miedo, ansiedad, juicio, prejuicio, duda, resentimiento y dolor. Así que iluminará lo que tenga que ser iluminado para que termines de caminar sobre valles de incongruencia y pesar; pues es momento de que conozcas los verdaderos caminos de la honestidad, plenitud, amor y paz interior que te harán crear tu nueva vida.
Soltar, será el mayor reto de todos; pues la incertidumbre de no tener las respuestas de lo que pasará mañana te hará tal vez contraerte aún más; así que dichoso el que finalmente se suelte en todos los sentidos y se permita rendirse al amor; pues si la luz envuelta en amor finalmente toma su trono, todo lo extraordinario y magnificente ha de reinar.
Eres amor… y así es.
Eres por siempre amado… y así es.
Autor: Gabriela Zarzosa Quintero
«He comprendido»
He comprendido que la vida es una continua enseñanza al desapego. A los 13 años solté esos patines que me acompañaron a tantas vivencias y en las que conocí grandes amigos que también tuve que soltar cuando nos cambiamos de casa.
Cuántas vueltas dimos a la misma cuadra, carcajadas, emociones, helados flotantes y esas deliciosas paletas heladas que disfrutábamos cuando teníamos unos pesos.
Jamás nos volvimos a ver; pero tengo muy claro que cumplimos nuestra misión… disfrutar del aquí y ahora. Todo tiene un tiempo, un ciclo, un recuerdo, una experiencia.
Solté y también me soltaron; a veces con miedo, con dolor, otras veces llena de esperanza. Y fue el Agradecimiento por el instante presente, lo que me permitió desvanecer el estigma del dolor para “Aprender“ a soltar e igualmente para “Aceptar” cuando me soltaran; pues aunque el amor es eterno y no tiene cadenas; toda vivencia tiene un tiempo que puede ser visto con miedo o con esperanza.
Así que no medí la vida por lo que me dio o me quitó; lo que gané o perdí; pues cuando se “vive” y se “ama” siempre se gana.
Agradecí y atesoré esos instantes que me han quitado el aliento y también porque esas terribles tormentas tuvieron sólo un tiempo .
Sabía que para poder recibir la primavera tenía que desprenderme de ese invierno; era la única manera de escribir el siguiente renglón de mi eterno camino.
Recuperé mis patines y todas sus sabias enseñanzas.
Hoy agradezco a todos los viajeros eternos que me han acompañado por un instante corto o largo en mi suculento y ya bendito camino.
Hoy te honro, me honro y agradezco que una parte de mí, sucedió y vibró a partir de ti.
Autor: Gabriela Zarzosa Quintero