Especiales
Mi deber como madre
Mi deber como madre es construir puentes y caminos de esperanza. Si lo hago, mis hijos aprenderán a edificar los suyos, y cada uno, representa la posibilidad de cambiar nuestra vida e incluso nuestro destino.
Lo supe cuando pude ver en los ojos de mis hijos su alma; porque es ahí cuando uno logra ver su grandeza, no su limitación; impulsando que desde niños se atrevan a creer en sí mismos y en las posibilidades infinitas para crear su camino.
No verán la vida con limitaciones sino con posibilidades de crear un nuevo puente o camino; y cada vez que construyan uno, verán una extensión de su propia grandeza.
Además, todos tienen algo maravilloso. Son de ida y vuelta, como todo en la vida que va y viene, permitiendo que sin importar el tiempo… el amor regrese al amor.
Autor: Gabriela Zarzosa Quintero